En España se está hablando bastante de El reino (2018), la última peli de Rodrigo Sorogoyen con el omnipresente (y muy bueno) Antonio De la Torre como protagonista. Sí porque El reino es una peli sobre los políticos corruptos y de estos ¡siempre hay un montón!
Pero parece que en España estamos solamente empezando la que podría ser una prolífica producción mediática sobre el tema, no como en Italia donde son años que se hacen películas que tratan de eso: uno de los primeros ejemplos de los que me acuerdo es Signore e signori, buonanotte del 1976, pero mucho más famosas son las recientes pelis de Sorrentino como Il divo (2008) y Loro (2018) sobre Giulio Andreotti y Silvio Berlusconi. Sin embargo en España, a pesar de los numerosos casos de politicos corruptos, el mundo del cine me parece que llega tarde. Y esta El reino quizá debamos apreciarla por ser uno de los primeros ejemplos, claro. Pero, siendo italiano, me ha parecido demasiado prudente. Me explico.
Sorogoyan elige no usar uno de los casos reales de corrupción de la historia reciente, sino una historia de ficción. No usa nombres reales, ni identifica el partido (al que se refiere solamente con la expresión “el partido”) de los protagonistas de la peli, y se entiende que la ciudad donde la historia tiene lugar podría ser Valencia (donde varios dirigentes del Partido Popular han acabado en la cárcel por varios casos de corrupción recientemente), pero tampoco eso se aclara bien. Además el director es muy cauteloso: se habla de fiestas en club con prostitutas, pero en la pantalla vemos solamente inocentes comidas entre colegas de partido y un viaje en un barco ¡dónde todos se han llevado a sus propios familiares!
Entonces, mientras la banda sonora se parece a las usadas por Sorrentino en sus pelis más políticas, las escenas son mucho más blandas. Y la peli sufre bastante por este deseo (o esta necesidad) de no comprometerse con referencias a hechos y personas reales. El guión es muy confuso, no se entiende bien lo que pasa, solamente que estos políticos hacen cosas ilegales y se hacen ricos… pero no entendemos de verdad cómo. Y hay demasiados personajes, ¡es imposible recordarlos todos!
En el final las cosas se hacen quizá hasta demasiado dramáticas, con un tentativo de homicidio que en realidad sirve solamente para llegar a la escena final con el corrupto que participa a uno de estos programas de televisión supuestamente duros con los políticos. Y allí el director rompe la cuarta pared para hablar directamente al espectador, para denunciar un sistema que parece completamente podrido. Antonio De la Torre es un político corrupto que cuando empezó con la política encontró las mismas cosas por las cuales está ahora acosado y que probablemente nunca cambien. Barbara Lennie es la voz teóricamente libre pero su canal televisivo tiene editores y dueños que pertenecen al mismo mundo contra el cual ella aparentemente lucha. “¿Dónde está la libertad?”, le pregunta él a ella. “¿Por qué has entrado en ese mundo corrupto e ilegal aprovechándose de la gente honesta de este país?”, le pregunta ella a él. Títulos finales.
Esta peli no me ha vuelto loco. Es bueno el tentativo de llevar a la gran pantalla la actualidad española. Es muy bueno Antonio De la Torre que es la principal razón para ver esta peli. Pero al final me todo ha parecido demasiado prudente, Sorogoyen habría debido osar más. Hay juicios reales y gente en la cárcel: ¡una historia real habría sido mucho más potente! Entonces recomiendo ver El reino, pero sin esperarse nada demasiado perturbador. Ciao!
Enlaces adicionales:
- Trailer de la peli en Youtube
- Página de la peli en Internet Movie DataBase
- Reseña de la peli en Espinof
- Reseña de la peli en Otros cines
- Reseña de la peli en Fila 7
- Reseña de la peli en Cinemagavia
- Reseña de la peli en Filmfilicos
- Reseña de la peli en Un millón de planes que mostrar
2 risposte a "El reino: reseña de la peli"